TECNICAS PARA ESCRIBIR POESIA
TECNICAS PARA ESCRIBIR POESIA
Aunque la poesía es una de las artes más subjetivas que existen, hay reglas, consejos y trucos universales que ayudan a que un ejercicio de intuición o de inspiración se convierta en un poema profesional y emotivo.
USA LA TÉCNICA DEL “BUSCADOR DE ORO”
Uno de los principales errores de quien empieza a escribir poesía es pensar que los poemas se escriben “a la primera”. Me siento, pienso, escribo y poco a poco va saliendo el poema, ya perfecto, ya con su forma final. ¡Error!
En poesía (y en literatura), la MITAD del proceso de escritura es la REESCRITURA. Nadie -o casi nadie- comienza escribiendo un texto final, sino un BOCETO, un ESBOZO… especialmente en poesía, que suelen ser textos tan breves y condensados que cada palabra cuenta.
¿Cuál es entonces el método ideal? Pues tal como hacen los dibujantes, primero hacemos un esbozo que después, más tarde, revisaremos, puliremos y al que añadiremos detalles y en el que tacharemos. Mucho.
En concreto, para empezar un poema, te recomiendo la técnica del BUSCADOR DE ORO: Consiste en sentarse y hacer un ejercicio casi de escritura automática, lanzarse a escribir dejándose llevar, sin razonar, sin autocensurarse. Sin pensar en puntos, comas, versos, orden, rima…
Siéntate y reserva media hora (o una hora) sólo para ti. Simplemente déjate llevar, y al menos durante media hora, llena folios de versos, palabras, ideas, sin detenerte a controlar hacia dónde vas, ni qué estás buscando.
Después, sólo después, relee el texto con calma y busca las “pepitas de oro“: expresiones, imágenes, frases, versos, un adjetivo que ha quedado perfecto junto a un sustantivo….
Y, a partir de ahí, puedes construir un poema (o varios), ya pensando hacia dónde va el texto, qué os sugieren los verbos, cómo arrancan los adjetivos.
NUNCA TE QUEDES CON LA PRIMERA IDEA
Insisto, es muy importante la reescritura de ese primer texto que nos surja.
¿Por qué? Pues porque la primera idea, lo primero que escribimos, entre otras cosas suele nutrirse de tópicos y de cosas ya oídas y leídas. La primera idea siempre, como decíamos antes, necesita de la re-escritura para sacarle todo su partido, especialmente en poesía.
Te lo demuestro rápidamente: cuando yo diga una palabra, tú dime la palabra que se te viene a la cabeza. Si yo digo “blanco” tú has pensado… “negro”, ¿verdad? O quizá, como mucho, “papel”, “leche” o “nieve”. Y si digo “mesa”, tú has pensado… silla. O quizá “madera”, “sillón”, “sentarse”.
No te preocupes, es normal: nuestro cerebro siempre va a lo fácil, y eso, en literatura, es ir al tópico, es una reacción natural. Pero lo hermoso de un poema es que nos sugiera algo nuevo, distinto; lo hermoso es que tenga tu propio estilo, tu propia esencia. Esa es otra de las cosas que debes trabajar en la REESCRITURA: no solo se trata de dar forma, sino de darle TU forma, TUS palabras.
Recuerda que los poemas se crean como los diamantes: surgen en caliente, pero se terminan puliendo en frío.
RECUERDA DEJAR UN MOMENTO PARA LA INSPIRACIÓN, OTRO PARA LA REVISIÓN
Recuerda siempre dar primero un espacio a la inspiración y el juego, sin juzgar, sin tachar. Y después –sólo después- sentarte tranquilamente a revisar, corregir, cambiar, eliminar o añadir.
No es buena idea ponerse inmediatamente a corregir un poema justo cuando has acabado de realizar un juego del “buscador de oro”, o cuando acabas de terminar un primer boceto. ¿Por qué? Porque tu cerebro está en fase “inspiración” y “juego”, no en la fase de “corrector”, ni de “seriedad”. ¿Sabías que incluso esas operaciones se llevan a cabo desde diferentes hemisferios del cerebro? En un artículo del año 2002 para Scientific American, Michael Gazzaniga caracterizó el hemisferio izquierdo como “inventivo e interpretador” y al derecho como “veraz y literal”.
Recuerda esta regla de oro: Todo escritor/a lleva dentro un niño que juega y un adulto que pone orden, y ambos son necesarios, pero nunca deben estar juntos en la misma habitación al mismo tiempo: frenan la creatividad.
LEE EN VOZ ALTA
La poesía tiene muchos recursos líricos de los que puedes echar mano para crear o mejorar tu poema: rima, aliteración, metáforas… pero si hay uno que nunca, nunca, puede faltar es EL RITMO.
Un poema siempre debe tener ritmo; incluso en la poesía actual (que no usa tanto la rima) el ritmo es algo que no se pierde.
¿Lo comprobamos?
Lee en voz alta estos versos de RUBÉN DARÍO
¡Pobrecita princesa de los ojos azules!
Está presa en sus oros, está presa en sus tules,
en la jaula de marmol del palacio real;
el palacio soberbio que vigilan los guardas,
que custodian cien negros con sus cien alabardas,
un lebrel que no duerme y un dragón colosal.
Y ahora lee estos versos de BELÉN REYES:
Hago trenzas de versos, me despeino.
Cuando se hace un milagro hay que dar caña.
Yo sé que es vida esto que se mueve
entre estas venas rotas y cansadas.
¿Notas el ritmo que destilan los poemas?
Lee estas frases en voz alta a continuación y compara:
“Trenzo versos, despeinándome
Cuando se hace un milagro, dale caña.
Si me muevo, estoy viva. Hasta ahí estoy segura
aunque estoy agotada y cansada de todo”
¿Ves la diferencia? La idea es la misma, o parecida, que el poema de Reyes, pero NO HAY RITMO (entre otros recursos).
No olvides LEER EN VOZ ALTA TUS VERSOS para comprobar si tienen ritmo.
¡Adelante y feliz creación de poemas!
COMO ESCRIBIR POESIA
Muchos de vosotros me preguntáis cómo escribir una poesía, qué es lo que se debe hacer para escribir un poema.
La verdad es que es algo que no me había planteado nunca, ya que suelo escribir con un estilo libre lo que me va surgiendo, pero voy a intentar ayudar a aquellos que no saben cómo comenzar.
Con estos consejos para escribir poesía quizás no te sea tan difícil
También puedes consultar mi artículo sobre las mejores poesías de la historia, quizás te sirvan de inspiración.
Cómo escribir una poesía
1. Decide el estilo de tu poema.
¿Vas a ir por libre? ¿Cuántos versos va a tener? ¿Será rima asonante o consonante? ¿Usarás la primera persona o no? Por ejemplo, yo suelo preferir la rima consonante y usar mi propia estructura, sin métrica y con rima en todos los versos. Eso depende de cada uno, a mí me gusta más el poema libre porque lo veo mucho más creativo, pero está bien que decidas todas estas cuestiones antes de ponerte a escribir.
Aspectos que puedes decidir antes de ponerte a escribir:
- Tipo de rima.
- Métrica (número de sílabas).
- Número de versos.
- Tipo de voz (primera persona del singular, del plural, tercera persona….).
- Uso de figuras literarias (¿Las usarás? ¿Cuáles?).
2. Habla con el corazón.
La poesía es alma, por lo que intenta conectar con tu interior para plasmar todo aquello que sientes. No tiene por qué ser acerca de tu vida, una injusticia social, por ejemplo, también puede ser fuente de inspiración para unos buenos versos. Sé sincero contigo mismo y esto se reflejará en lo que escribas.
¿No sabes cómo enfrentarte al papel en blanco? Consulta estos consejos para encontrar inspiración para escribir.
3. Ten claro tu mensaje.
¿Qué es lo que quieres contar? Si no tienes claro cuál es el objetivo de tu poema, difícilmente podrás esperar a que las musas llamen a tu puerta. Visualiza tu objetivo para llegar a la meta.
5. Decide si usarás figuras literarias.
Las figuras literarias son muy comunes en los poemas, así que intenta familiarizarte con ellas y ver cuáles pueden ser útiles para transmitir tu mensaje. A mí, por ejemplo, me encanta usar metáforas en mis poesías.
6. Decide dónde vas a escribir.
A mí me gusta escribir poesía a mano, en un cuaderno en el que voy redactando y tachando a mi antojo. Además, me gusta estar sola y ponerme música clásica para relajarme. Intenta probar varios lugares antes de decidir en cuál te sientes más cómodo.
7. Corrige tu texto.
Si es la primera vez que escribes poesía, no hay nada mejor como las comunidades online, que te podrán dar una opinión objetiva acerca de lo que has escrito. Revisa la ortografía y la gramática, recuerda que la poesía se basa en la belleza de las palabras…
¿Qué es la poesía?
Para hacer una pintura cubista es necesario saber lo que es el cubismo. Para fabricar una silla lo ideal es saber primero lo que es una silla. Esto no es una norma; se puede hacer un dibujo cubista o fabricar una silla intuitivamente, sin profundizar en exceso sobre ambos objetos. Lo mismo ocurre con la poesía: muchos son poetas sin saberlo, aunque para aprender a escribir poesía siempre es recomendable conocer el género y lo que es en realidad.
La poesía, también llamado género lírico, es una forma de expresión oral o escrita que promueve un uso particular del lenguaje. Ese uso particular está dotado de belleza, ritmo, pausas, musicalidad y de lo que comúnmente se llaman figuras literarias. En otras palabras: la poesía es una forma distinta de usar las palabras. Veamos estos ejemplos de poesía y comparemos:
Expresión 1: «Tu aliento es reconfortante y productivo»
Expresión 2: «Tu aliento es semen gaseoso que embaraza mi cerebro»
¿Cuál de las dos expresiones hacen un uso distinto del lenguaje? ¿En cuál de ellas hay poesía? La respuesta es obvia. Puedes hacer un ejercicio también muy simple: busca en el diccionario el significado de las palabras “beso” o “besar” , y luego lee el Capítulo 7 de [easyazon_link identifier=»8466331905″ locale=»ES» tag=»escribirr-21″]Rayuela, de Julio Cortázar[/easyazon_link]. Verás también la diferencia. Aunque el capítulo 7 de Rayuela está escrito en prosa ¡hay poesía en él!
¿Qué es un poema?
La poesía es el género literario y el poema la forma en que ésta se presenta al lector. Los poemas están conformados por versos (líneas). Puede manifestarse en métricas y rimas, o en verso libre. Pero además un poema también está compuesto por estrofas, que agrupan a su vez un número determinado de versos (o líneas). ¿Qué es un verso en un poema y cómo configuran estrofas? Veamos los siguientes ejemplos de poemas:
Ejemplo 1:
Quisiste escribir
con los ojos cerrados
Vivías ciego
Cuando los abriste
después de morir
aprendiste
El siguiente poema está conformado por seis versos y tres estrofas. Las estrofas están compuestas por 2, 1 y 3 versos. Están separadas con espacios.
Ejemplo 2:
Lo secó todo el soplo de mi aliento
y naufragué con mi doliente amor;
lejos ya de la paz y del contento,
mírame aquí en el valle del dolor
Era dulce mi pena y mi tristeza;
tal vez moraba una ilusión detrás;
mas la ilusión voló con su pureza;
mis ojos, ¡ay!, no la verán jamás.
Aquí tenemos un poema de 8 versos y dos estrofas. Cada estrofa está compuesta por 4 versos. El ejemplo 1 está escrito en verso libre (sin rimas) y el ejemplo 2 está escrito en rima.
Es importante que entiendas lo siguiente: puedes encontrar poesía en otros géneros literarios como el narrativo o dramático. La poesía no se circunscribe en estricto al poema. También habita en canciones, cuentos, novelas, discursos, obras de teatro, etc. Pero su casa, su hogar, el lugar donde se proyecta como género es el poema.
¿Cómo escribir poesía?
Antes de comenzar es preciso aclarar lo siguiente: no existe un método único para escribir poesía. No es cómo hacer una receta de cocina. Como cada persona está dotada de un universo sensible propio, se escribe poesía de acuerdo a las necesidades, formas e intereses de cada quien.
Hay poetas que escriben en servilletas, papeles sueltos, cuadernos, ordenador, teléfonos móviles y hasta en la espalda desnuda de otra persona. Hay los que escriben en bares, parques, cafetines, bibliotecas, calles y en la comodidad del hogar. Están los que escriben un poema cada quince días y otros que escriben un poema diario o cada cuatro horas. Hay quienes no creen en la inspiración y otros que no pueden vivir sin las musas.

La idea de este post no es imponer un método, pero sí colaborar con el principiante para que descubra por sí mismo el método que mejor se le aproxime. Y aunque la diversidad de formas para escribir poesía responde al temperamento y personalidad de cada poeta, hay algunos puntos en común, pautas o rutinas que son frecuentes en todos. Hablemos aquí de lo básico a través del siguiente ejercicio:
Cómo hacer un poema
- Selecciona un tema: los temas para poemas suelen definirse en una o dos palabras. Anota en un papel la siguiente oración: «Quiero escribir un poema sobre…», y luego colocas el tema que puede ser la vida, la muerte, el amor, la amistad, el olvido, la infancia, la ciudad, el vacío, etc.
- Escribe el título: si tu poema es sobre el amor puedes titularlo como «El amor» o puedes no ser tan literal y titularlo: «Labios en la lejanía.» Hay poemarios que no usan títulos y otros que sí. Después de seleccionar tu tema, escribe el título de acuerdo a tus propias expectativas e intenciones. También puede hacerse a la inversa: escribiendo primero el poema y luego el título.
- Poema corto o largo: piensa en la longitud de tu poema, aunque dicha medida dependerá del tipo de aliento que tengas para escribir. Es decir: si tu tendencia es la extensión o la brevedad. Los poemas extensos suelen tener mayor capacidad de desarrollo y los breves apuntan más hacia un efecto visual y sonoro como los haikús, por ejemplo.
- Estrofas: hay poemas de 20 páginas que son de una sola estrofa. Hay de pocas o numerosas estrofas. Dependerá de lo que desees.
- El primer verso: un verso básicamente es la línea de una estrofa. Para el primer verso de este ejercicio, intenta ser breve como en los ejemplos 1 y 2 que vimos anteriormente. Imagina que tu primer verso es la primera cascada de un conjunto de cascadas: la primera línea del poema llevará a la segunda con fluidez. Recuerda sobre todo que estás escribiendo poesía, y el género implica mayor concentración, síntesis, y un uso del lenguaje distinto al académico, informativo o narrativo. Evita escribir: «El deseo es un rasgo del comportamiento humano producto de una serie de reacciones químicas en nuestro organismo.» Cómo ves poéticamente el amor es la pregunta que debes hacerte.
- Ritmo: las pausas, la forma de suspender un verso y continuar otro, las expresiones y el hecho de que cada palabra es un sonido y contiene un universo en sí misma, te darán ritmo y musicalidad.
- Redacción: construye el poema hasta que sientas que has agotado el tema. Trata de redactarlo con fluidez y siempre desde un lenguaje poético.
- Corrección y arreglos: al finalizar el poema puedes corregirlo y arreglarlo de inmediato o puedes dejarlo reposar unos días para una lectura más en frío y luego corregirlo.
Verso libre o rimas
La decisión de escribir en verso libre o hacerlo con rimas es personal. En todo caso, para escribir en rimas, hay una serie de reglas y formas para las que debes tener un mínimo de conocimientos.
La métrica en poesía implica que un poema tenga un determinado número de estrofas y que cada verso tenga un determinado número de sílabas. El soneto, por ejemplo, es un poema compuesto por dos estrofas de cuatro versos y dos estrofas de tres versos.
No nos extenderemos en esta materia por lo extensivo que sería explicarlo, aunque nuestra recomendación es que investigues y leas algunas referencias.
La inspiración
¿Cómo crear un poema sin inspiración? Para esto hay opiniones distintas. Algunos creen que la inspiración es un “soplo divino” o una especie de revelación sagrada. Los que defienden esta postura creen que la inspiración es externa al poeta y que hay que caer en la gracia de las musas para inspirarse.
Otros, en cambio, piensan que la inspiración sólo es un estado mental y una actitud particular del poeta durante sus momentos de escritura. En este caso la inspiración no es externa al poeta sino que se produce dentro de él por diferentes causas: un momento de tristeza o de euforia, la conmoción por un suceso en particular, la melancolía o nostalgia, la fe en algo o en alguien, etc.
En todo caso, creemos que es similar a un sexto sentido y que responde sobre todo al nivel y tipo de sensibilidad del poeta. Por ejemplo, hay personas que son más proclives a escribir poesía sobre temas sociales como la injusticia, la pobreza, la comunidad, y pueden inspirarse al estar dentro de estos contextos o por el fervor de sus ideales. Otros poetas cuya tendencia son las pasiones o el hedonismo, se sienten inspirados cuando aman o experimentan emociones intensas.
El poema eres tú
Tus experiencias, recuerdos, ideales, convicciones, opiniones y hasta tu vida misma se verá reflejado en todo lo que escribas. En este sentido el poema eres tú. Dicho de otro modo: el estilo depende de tu manera de ver y sentir el mundo, la realidad, los sentimientos y emociones.
Mario Benedetti lo dijo de esta forma: quien pretenda escribir poemas de amor sin haber sentido amor alguna vez, sus poemas sonarán huecos. En este sentido, no se puede hablar de la obra de un escritor si no se toma en cuenta su vida y la época en la que ha tenido que escribir.
Una de las preguntas más frecuentes de quienes se inician en el arte de la poesía es la siguiente: ¿sobre qué escribir?
Pues bien, las ideas para hacer un poema están dentro de ti pero también se encuentran en la calle, el hogar, el trabajo, en las conversaciones o en las imágenes o situaciones que vivimos a diario. Todo esto debe atravesar tus propios filtros y percepciones.
¿Cómo hacer una poesía sobre la vida si no has vivido nada? Esta es la pregunta.
Leer, leer y leer
La poesía, como todo género literario, debe cultivarse. Los que escriben novelas son lectores empedernidos de novelas. Los ensayistas de ensayos. Los poetas de poemas. Hay que leer, sin duda, y leer de todo: poemas, narrativa, ensayos, periódicos, teatro, etc. Pero para quien quiera escribir poesía lo más recomendable es que lea más poesía que cualquier otro género.
Los escritores son las únicas personas que leen un libro a placer pero también como si practicaran una autopsia. Son cirujanos de sus libros favoritos. No sólo leen el contenido sino que se obsesionan por cómo fue escrito el libro, la forma de los versos, la entonación, los temas, los recursos expresivos.
En el artículo los mejores libros de poesía puedes encontrar una buena selección de libros recomendados que pudieran situarte en un conjunto de estilos y autores. Lectura y más lectura es la consigna. Recuerda que por lo general quienes son lectores asiduos de poesía terminan siempre por escribir poemas. Los libros incluso pueden ofrecerte ideas para poemas, tratamientos, recursos.
Borges es un ejemplo extremo de esto: se ufanaba más por los libros que había leído que por los libros que pudo escribir.
Ejercicios prácticos de iniciación
En esta lección se exponen una serie de ejercicios que puedes realizar para acercarte un poco más a los procesos de escritura de un poema. Son prácticos y sencillos y tienen la finalidad de hacerte comprender cuál es la materia prima de un poema (las ideas) y cuáles son las herramientas para crearlo: las palabras.
Ten en cuenta que anteriormente, en este blog ya se habló en profundidad de métodos para la creación de ideas como el binomio fantástico, inspirarse en periódicos o en fábulas clásicas y hacerse la pregunta ¿qué ocurriría si…?, pero en este caso abordamos métodos más cercanos a la poesía:
Juego de palabras
Selecciona algunos temas de poemas que pudieran tener una vinculación especial contigo, y busca una tijera, hojas, cola blanca y periódicos viejos o revistas. Luego recorta palabras que guarden relación con el tema y redacta con esas palabras una estrofa de siete versos. No titules el poema, busca imágenes relacionadas, recórtalas y pega alrededor de la estrofa esas imágenes. Tendrás un poema más visual y único que puedes obsequiar si lo deseas.
El cadáver exquisito
El cadáver exquisito es una técnica que implementaron los poetas surrealistas a principios de siglo pasado. Es una forma de creación colectiva en la que un grupo de personas redactan un poema sin la selección previa de un tema. En una hoja la primera persona escribe un verso, luego la hoja se dobla para ocultar el verso y pasa a manos de otra persona para que realice el mismo procedimiento.
La regla de este ejercicio es que todos escriban sus propios versos sin leer los del resto de las personas. Otra norma es que los versos deben escribirse a golpe de pluma, es decir, sin pensarlos. Debe ser rápido. En este sentido los versos serán un reflejo directo del inconsciente y del estado mental, emocional o anímico del participante.
Poesía gráfica
Piensa, por ejemplo, en un caracol. Luego, sobre una hoja blanca, dibuja con palabras la figura de un caracol. La idea es que los versos o líneas sean los que tracen los contornos de la figura, obteniendo como resultado el dibujo de un caracol hecho con palabras. Puedes usar las imágenes que quieras: una casa, un corazón, una manzana, que serían los temas, y en función de estos dibujar con palabras estas figuras.
Conclusión
El hombre y la poesía están unidos desde siempre. Es su voz más noble y una de las actividades por excelencia que nos distinguen de las otras formas de vida. Los métodos para escribir poesía varían de acuerdo a las exigencias y características del poeta.
Sin embargo, hemos tratado con este artículo de exponer algunas pautas que pueden ser de utilidad para lograr una ruta que luego el principiante irá ajustando. Resumimos este post en lo siguiente: escribe, escribe todo lo que quieras y puedas, sin miedo, siempre y cuando uses el lenguaje en sus formas más elevadas.
La práctica hace la técnica. Otra ley a tomar en cuenta.
Comentarios
Publicar un comentario